Mantener un vínculo vivo con Tierra Santa es una experiencia que nuestros miembros viven de diferentes maneras, pero siempre de forma muy intensa.
Además del apoyo financiero que se envía cada mes al Patriarcado latino para los gastos institucionales, las escuelas y el seminario, y que asegura de muchas maneras la continuidad de las actividades centrales de la vida de la diócesis, la posibilidad de tener un vínculo directo y privilegiado con una pequeña entidad permite a las Lugartenencias y a sus miembros conocer la vida local, establecer relaciones amistosas y crear vínculos profundos.
En este sentido, las Lugartenencias suelen favorecer una relación de continuidad con determinadas realidades o ciertos tipos de proyectos. La Lugartenencia de Luxemburgo, que cuenta con una cuarentena de miembros, precisa que la elección del proyecto financiado durante el año 2021 de la lista de pequeños proyectos acordada entre el Gran Magisterio y el Patriarcado latino de Jerusalén «se inscribe en la línea del proyecto financiado por la Lugartenencia en 2020». En efecto, en los dos últimos años, los Caballeros y Damas de Luxemburgo han colaborado en la instalación o la mejora de los sistemas de información.
En 2021, en particular, el departamento de la capellanía del grupo de jóvenes cristianos de Jabal Amman (Jordania) se ha beneficiado de ello, con un proyecto de renovación de la sala principal de reuniones y de los equipos informáticos apropiados para celebrar conferencias, charlas y actividades a distancia en esta época de pandemia.
Los miembros de la Orden suelen visitar los proyectos que apoyan durante su peregrinación a Tierra Santa. Por ello, los Caballeros y Damas de Luxemburgo esperan con impaciencia su peregrinación en junio/julio de 2022 para poder ir a Jordania y ver cómo su ayuda ha hecho posible la realización de este proyecto y conocer a las personas que se benefician de él.
La Lugartenencia para Irlanda, que tiene el mismo vínculo de afecto hacia una pequeña realidad concreta, nos contó su experiencia con la comunidad cristiana de Bir Zeit, una ciudad situada a siete kilómetros al norte de Ramallah: la Lugartenencia contribuyó primero en la renovación del salón parroquial, que ahora es utilizado para diversas actividades por los feligreses y los alumnos de la escuela contigua, y luego decidió continuar esta relación ya establecida y comprometerse con la finalización de las obras de impermeabilización del suelo de la parroquia.
También para los Caballeros y Damas irlandeses, la peregrinación es una oportunidad para experimentar y reforzar los vínculos con una comunidad que tiene nombres y rostros: «Durante la peregrinación de 2019, cincuenta miembros irlandeses y sus amigos se reunieron con el párroco, visitaron el salón parroquial, conocieron a los estudiantes y rezaron en la iglesia.
Todos quedaron impresionados por el entusiasmo de la población local».
Entre las diversas Lugartenencias que disfrutan visitando no tanto los proyectos que apoyan como las personas que se benefician de ellos, la Lugartenencia occidental de Estados Unidos tuvo la suerte de poder viajar en agosto de 2021 a Jordania para asistir a la ordenación de los nuevos sacerdotes del Patriarcado.
Desde 2005 esta Lugartenencia estadounidense apoya el programa “Adopt a Seminarian” («Adopta un seminarista»), que apadrina cada año a los seminaristas del Seminario patriarcal de Beit Jala otorgando becas. «Qué alegría recibimos al ser adoptados como hijos de Dios por la gracia de su Hijo Jesucristo. Y qué gran bendición es que podamos adoptar y ocuparnos de los seminaristas en Tierra Santa», dicen los miembros de la Lugartenencia Occidental de EE.UU., que nos cuentan que siguen rezando por estos chicos y manteniendo una correspondencia con ellos.
En una carta dirigida a la lugarteniente Margaret Romano, el rector del seminario, el padre Bernard Poggi, escribe: «Quiero agradecerle su iniciativa… Su presencia y apoyo al seminario es una maravillosa expresión de su amor por Tierra Santa y sus futuros sacerdotes».
Gaza es otra realidad especialmente cercana a los corazones de nuestros miembros, y se están llevando a cabo varios proyectos que benefician a la población local, especialmente a la pequeñísima comunidad cristiana de unos mil creyentes de una población de dos millones.
Desde 2018, la Lugartenencia alemana de la Orden envía fondos para facilitar la entrada de jóvenes cristianos en el mundo laboral de Gaza, pagándoles un salario en colaboración con empresas locales.
Desde el inicio del “Job Creation Program” («Programa de creación de empleo»), más de 40 jóvenes han podido utilizar sus conocimientos y competencias para desarrollar actividades comerciales y empresariales sobre el terreno: jóvenes farmacéuticos, informáticos o auxiliares sanitarios han trabajado y obtenido un salario digno. «Gracias a este programa de formación -explica el padre Gabriel Romanelli, párroco de Gaza- las posibilidades de encontrar un empleo fijo en el mercado laboral son mucho mayores.
Varios participantes en el programa han encontrado un puesto de trabajo en una empresa, aunque la tasa de desempleo es extremadamente alta, especialmente para los jóvenes.
Algunos de nuestros jóvenes han podido alquilar o comprar un piso e incluso dar el paso de casarse ahora que tienen un sueldo».
La Lugartenencia USA North Central también decidió invertir en un proyecto en Gaza relacionado con la escuela y la parroquia de la Sagrada Familia, sobre todo financiando el campamento de verano de un mes de duración para unos 200 niños. «El campamento de verano ofrece un entorno positivo para los niños cristianos y musulmanes que participan en él. La mayoría de estos niños sufren un trastorno de estrés postraumático…
En la escuela y en el campamento, se conocen y se hacen amigos», explica la Lugartenencia sobre el proyecto.
En Gaza, otro proyecto pequeño realizado por la Lugartenencia para el Norte de Italia que contribuyó a la renovación de la casa de las Hermanas del Verbo Encarnado, muy involucradas en actividades pastorales y humanitarias con la comunidad local.
La misma Lugartenencia decidió también destinar parte de sus fondos a la restauración del sistema de recogida de aguas pluviales de la sede del episcopado del Patriarcado latino.
Además de estos proyectos pequeños, la Lugartenencia para el Norte de Italia informa que en 2021 pudo recibir y remitir al Gran Magisterio las aportaciones del cinco por mil recibidas a través de la Fundación religiosa «Opera per la Venerazione dei Luoghi Santi e del Santo Sepolcro» («Obra para la veneración de los santos Lugares y del Santo Sepulcro») creada por la Lugartenencia en 2013: Se habla de unos 100.000 euros que la Lugartenencia ha querido destinar a becas para estudiantes cristianos que frecuentan las escuelas del Patriarcado latino de Jerusalén.
Siguiendo en el ámbito de la educación, la Lugartenencia de Bélgica envía desde 2017 una ayuda a la escuela española de Jerusalén dirigida por las Misioneras Hijas del Calvario, apadrinando a doce alumnos.
«El coste por alumno es de unos 1.000 euros al año, pero las hermanas también acogen a los alumnos que no pueden pagar su escolarización», escriben los miembros de Bélgica. Y es para apoyar estas situaciones que los Caballeros y Damas intervienen, en algunos casos incluso pagando la pensión alimenticia de los jóvenes cuyas familias se encuentran en una situación de pobreza absoluta.
La Lugartenencia para Austria también tiene una larga historia con varias realidades en Tierra Santa. Desde 2001, su Comisión para Tierra Santa ha estado buscando la manera de comprometerse sobre el terreno buscando los medios de apoyar económicamente a las familias cristianas y ha decidido hacerlo comprando productos fabricados en Palestina. Inicialmente, la acción se centró en los productos de madera de olivo, a los que se añadió, durante más de diez años, la distribución de aceite de oliva producido en Taybeh, un pueblo cristiano a quince kilómetros al noreste de Jerusalén.
Desde 2009, la Lugartenencia ha conseguido vender más de 135.000 botellas de aceite, enviando 637.000 euros a Tierra Santa, la mayor parte de los cuales se han invertido de nuevo en proyectos locales.
En esta actividad participan las Secciones y Delegaciones austriacas de la Orden, que promueven activamente las ventas a través de diversos canales.
Por último, el aceite de oliva virgen extra de Taybeh es utilizado por todas las diócesis austriacas como aceite bendito consagrado durante la misa crismal. «Gracias a la iniciativa del aceite de oliva, hemos podido mejorar la situación económica de la comunidad de Taybeh y sus habitantes. Los beneficios de esta iniciativa se han utilizado para apoyar otros proyectos en Tierra Santa», se felicitan los miembros austriacos de la Orden.
Otras Lugartenencias realizan actividades de recaudación de fondos que se llevan a cabo de manera especial durante ciertos momentos importantes, como las reuniones anuales y las investiduras, o las celebraciones especiales organizadas con otras entidades vinculadas a la vida diocesana. La Delegación Magistral para Noruega, por ejemplo, colaboró con Cáritas en la organización de una misa para recaudar fondos para ayudar a la población de Tierra Santa afectada por la crisis de la pandemia.
Por su parte, la Lugartenencia Norte de Estados Unidos organizó con éxito su reunión de agosto en Sioux Falls con la participación de más de 500 Caballeros y Damas. Fue una oportunidad para recibir noticias directamente de Tierra Santa, lo que dio un impulso aún mayor a la solidaridad. En efecto, tras los testimonios de Sami el-Yousef, director administrativo del Patriarcado, y de George Bannoura, propietario de un establecimiento de artesanía en Belén, varios miembros quisieron hacer una contribución adicional a una colecta especial que superó los 100.000 dólares únicamente durante el fin de semana.
Además de esta iniciativa espontánea, la Lugartenencia también decidió financiar íntegramente el fondo de becas para los estudiantes de enfermería de la universidad de Belén con 100.000 dólares.
Fuente: Gran Magisterio (Marzo de 2022)